Sus
genialidades puntuales y su afán por obtener beneficios parecen dos
de los motores que han impulsado el gran éxito de Jobs, pero
podemos sacar algunas otros consejos que el mismo nos dejó. Para
triunfar, Jobs nos deja una tabla de 12 reglas básicas que iré
comentando según mi parecer:
- Se tú mismo y haz lo que te gusta: evidentemente, obliga a alguien que quiera ser abogado a ser médico y siempre será un médico mediocre.
- Se diferente: la diferencia te hace destacar. Una tecnología innovadora es aquella que es diferente a las demás.
- Esfuérzate al máximo: sin sacrificio no hay gloria, como se suele decir. Si exprimes lo mejor de ti, conseguirás grandes cosas.
- Analiza los pros y los contras: así podrás potenciar los puntos fuertes y fortalecer los puntos débiles de tu producto.
- Sé emprendedor: el éxito no viene solo, evidentemente. Tienes que ser el primero en algo o el mejor, solo así conseguirás éxito.
- Piensa en los pasos futuros: esto te ayudará a crear una ruta para planificar mejor las próximas novedades o evoluciones.
- Aspira a ser el líder: si te conformas con la mediocridad, siempre serás mediocre, Pero si persigues la perfección, tal vez no la consigas, pero tu producto será casi perfecto.
- Visualiza el resultado: enfoca tu esfuerzo en el resultado. Es lo que valoran en realidad.
- Pide opinión: a veces dos cerebros piensan más que uno, cuatro ojos pueden ver más que dos,...
- Innova y crea, no copies: Jobs no da este consejo, aunque el pecó en este sentido de copiar a otros, pero está bien que lo que hagamos no lo haya echo nunca nadie.
- Aprende del fracaso: en mi opinión se aprende más del fracaso que de algo bien hecho. El afán por superarte te hace obtener mejores resultados y no cometer esos mismos errores en el futuro.
- Aprende constantemente: si un ingeniero deja de estudiar tras obtener el título, en ese mismo momento pasa a estar desactualizado.
Fíjense
en estos apuntes que nos deja Jobs, son muy importantes y tiene toda
la razón. Espero que los apliquen y les sirvan de consejo. A mi
desde luego me han servido. Otra cosa que me llama la atención de
Jobs es sus presentaciones, en todas creaba una historia para
mantener expectantes a los asistentes. En ellas siempre había un
villano y un héroe, esto parece involucrar más a la gente y que se
posicione en favor de uno. Me fascina hasta que punto Jobs cuidaba
todos los detalles, hasta las presentaciones de sus productos eran
originales y cada cosa tenía un fin premeditado.
En la
búsqueda de accionistas y financiación, en definitiva en cuestiones
de negocios y dinero, era donde Jobs más destacaba. Tanto es así,
que para conseguir liquidez hacía cualquier cosa. Cuando en 1986,
NeXT quiso conseguir una inversión de 20 millones de dólares
provenientes del multimillonario Ross Perot, la directiva de NeXT
invitó a este a la compañía. Randy Adams y Steve Jobs habían
destinado parte del dinero conseguido tras vender la última compañía
en comprarse un Porsche 911 cada uno. Así que Jobs, muy acertado,
pidió a Randy que tenían que esconder los coches, no podían estar
visibles en el aparcamiento. Randy preguntó el motivo y Jobs le
contestó: “Ross Perot está de camino y tiene la intención de
invertir en la compañía, pero no queremos que piense que tenemos un
montón de dinero.”. Así pudo conseguir los millones que quería...
de lo contrario no los habrían obtenido.
Seguir por: I, II, III, IV y IV.
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